¡Los peces vulnerables a la pesca en la Reserva Marina de la Illa de l'Aire se han duplicado tras cinco años de protección!

El seguimiento científico del IEO y OBSAM confirma los beneficios de la protección de esta zona, aunque alerta sobre riesgos por la reducción del área protegida y la falta de vigilancia. La reserva, declarada en abril de 2019 por el Govern de les Illes Balears, tiene como objetivo la recuperación de recursos pesqueros y la conservación de hábitats esenciales del sureste de Menorca.
Un estudio liderado por el Instituto Español de Oceanografía (IEO-CSIC), a través de la Estación de Investigación Jaume Ferrer, y el Observatorio Socioambiental de Menorca (OBSAM-IME) revela una mejora significativa en las poblaciones de peces vulnerables a la pesca en la Reserva Marina de la Isla del Aire, cinco años después de su declaración. El informe destaca un aumento del 96 % en abundancia y del 161 % en biomasa en las zonas de máxima protección.
En julio de 2024 se realizó la quinta campaña de seguimiento de peces vulnerables a la pesca en la Reserva Marina de la Isla del Aire, cinco años después de su declaración. Durante la campaña se realizaron 108 censos visuales, cubriendo un total de 27.000 metros cuadrados de fondos rocosos en dos estratos de profundidad: superficial entre 5 y 15 metros y profundo entre 16 y 26 metros; y en tres niveles de gestión: reserva integral (cerrada a la pesca salvo desde costa), reserva parcial (donde se permiten algunos usos de pesca) y zona control (fuera de la Reserva).
El informe constata que, en el estrato superficial de la zona de reserva integral, la abundancia media de peces ha aumentado un 96% y la biomasa un 161% desde el inicio del estudio. Esta mejora no se observa en las zonas abiertas a la pesca, donde los valores se han mantenido estables.
En el estrato profundo, los resultados son prometedores, pero menos concluyentes, principalmente debido a un cambio en la zonificación de la reserva en el año 2022 que dificulta la interpretación de los resultados. Aun así, en 2024 la zona de reserva integral, en este estrato de profundidad, presenta un aumento en abundancia y biomasa respecto a la zona control de 1.6 y 2 veces, respectivamente.
Aunque la abundancia y la biomasa han mejorado en la reserva, las poblaciones están constituidas principalmente por individuos juveniles, de modo que el tamaño medio permanece por debajo del que alcanzan los ejemplares adultos de las distintas especies. De este modo, durante los cinco años transcurridos desde la declaración de la reserva, no se han detectado cambios significativos en las tallas medias ni en los rangos de tallas de las especies estudiadas, lo que sugiere que los ejemplares más grandes y longevos todavía no han tenido tiempo suficiente para consolidarse en el ecosistema. En los últimos años de muestreo y en ambos estratos de profundidad, se ha observado un notable aumento en la contribución a la biomasa total de especies de alto nivel trófico, especialmente del mero.
Una modificación normativa en 2022 redujo un 22 % el área de protección integral, disminuyendo notablemente la disponibilidad de fondos rocosos profundos protegidos. Según apunta el equipo científico, esta reducción, unido a la falta de vigilancia permanente en la reserva ponen en riesgo su efectividad para la recuperación y conservación de las especies ícticas vulnerables a la pesca.
Los resultados de este informe ponen de relieve la necesidad de ampliar el porcentaje de hábitat rocoso idóneo para la población adulta reproductora del área de máxima protección de la reserva marina. Del mismo modo, se constata que la presión pesquera en las zonas adyacentes (reserva parcial y zona control) sigue siendo elevada.
Historia de la Reserva Marina de la Isla del Aire
La Reserva Marina de la Isla del Aire fue declarada en abril de 2019 por el Govern de les Illes Balears como parte de la Red de Reservas Marinas de Baleares. Su objetivo es la recuperación de recursos pesqueros y la conservación de hábitats esenciales del sureste de Menorca. La reserva se extiende sobre 7,2 km² e incluye dos zonas de gestión diferenciadas: una de especial protección para el buceo, dónde solo está permitida la pesca desde costa (reserva integral), y otra donde se regula la pesca artesanal y recreativa (reserva parcial). A diferencia de otras reservas marinas de gestión pesquera de las Islas Baleares, la Reserva Marina de la Isla del Aire no cuenta con una zona con exclusión total de la pesca. En 2022, la zonificación de la reserva se modificó reduciendo un 22% el área de reserva integral de protección más estricta.
Este proyecto ha sido desarrollado en el marco de los Programas de seguimiento científico del medio marino de la Estación de Investigación Jaume Ferrer de la Mola y del Observatorio Socioambiental de Menorca (OBSAM-IME) y cuenta con la aprobación de la Dirección General de Pesca y Medio Marino del Govern de les Illes Balears. La Estación Jaume Ferrer está cofinanciada por la Consejería de Educación y Universidades del Gobierno Balear y por el Instituto Español de Oceanografía. El OBSAM-IME ha contado con la financiación de Menorca Preservation desde el inicio del proyecto (2018-2022) y de la Agencia Menorca Reserva de Biosfera del Consell Insular de Menorca (2018, 2019, 2020 y 2024).